Tal es así, que delegados de los sectores de Tránsito, Barrido y Control Ambiental elevaron sendas notas a la conducción del gremio para explicitar el malestar. Este viernes serán recibidos por la cúpula de la Aoem e intentarán llegar a un entendimiento.
El acuerdo rebricado tras la última reunión paritaria, determinó: un bono de fin de año de $1.500 para todos los trabajadores (a pagarse en dos tramos, uno en enero y el otro en febrero) y que se extenderá el plus extraordinario por tres meses más, pasará de $700 a $1.000.
Además, se otorgorá un adelanto de diciembre de 3.000 pesos a ser abonado en los últimos días del mencionado mes.
Con estos anuncios, el salario mínimo municipal será a partir de noviembre $15.500; mientras que los trabajadores neikes recibirán una remuneración mensual de $7.100.
Estas mejoras son consideradas insuficientes para una buena parte de los empleados de la Municipalidad, que expresaron su bronca contra el intendente, Eduardo Tassano. Como también contra la conducción de la Aoem, a quien consideran "cómplice" de la actual gestión comunal.
El malestar es creciente teniendo en cuenta la devaluación del peso producida en el mes de agosto, y la inflación que se proyecta en 55% para fin de año. A lo que se suma un nuevo aumento de la Canasta Básica del 2,5% en el mes de octubre.
Con esta última suba, una familia tipo (compuesta por dos mayores y dos menores) necesita más de 35 mil pesos para no ser pobre. Son 20 mil pesos más que el salario mínimo de los trabajadores municipales en Corrientes.