El martes se realizó una reunión en la que unos 60 dirigentes del Partido Justicialista (PJ) se reunieron con la ex presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, en la sede  del Instituto Patria en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Dos cuestiones llamaron la atención de las imágenes que trascendieron: la primera es la resistencia de Cristina de venir a Corrientes (solo estuvo una vez en Itatí en el 2012). Lo que provocó que 60 personas se debiera trasladar de la provincia a Buenos Aires para mantener un encuentro con la actual titular del PJ nacional.

El segundo dato importante es el lugar de preponderancia que se le dio a la ex senadora nacional, Ana Almirón; y a uno de los fundadores de La Campora, José Ottavis. Quien, alejado de la agrupación que dirige Máximo Kirchner, está radicado hace varios años en Monte Caseros.

Ambos fueron los únicos dirigentes de Corrientes que estuvieron sentados al lado de Cristina, junto a los interventores del PJ correntino, Ana Teresa García y Máximo Rodríguez. En lo que se reflejó como la presidencia de la reunión.

Los demás dirigentes correntinos se mezclaron frente a la cabacera del encuentro, en una especie de tribuna destinada al público general.

Allá si les pudo ver al intendente de Paso de los Libres, Martín "Tincho" Ascúa; a los diputados nacionales, Jorge Antonio Romero y Nancy Sand; y a los senadores provinciales, Martín Barrionuevo y José "Pitín" Ruiz Aragón.

Raro el caso de Aragón, ya que es el jefe de La Campora de Corrientes desde sus inicios, pero nunca logró entablar un feeling con Cristina. Hoy ve opacado su ansiado lugar de armador en la provincia ante la presencia de Ottavis.

Por algo Cristina ya eligió al participante de Bailando por un Sueño y ex novio de Vicky Xipolitakis para que lo acompañe en la nueva conducción del PJ nacional.