Este martes se realizó la sexta audiencia en el juicio por el femicidio de Irina López. La joven de 16 años que fue víctima de femicidio en el 2018, tras desangrarse en un abuso sexual grupal.

Si bien estaba previsto un juicio abreviado de cuatro audiencias, se fue alargando debido a que algunas testimoniales no pudieron realizarse los días previstos. 

Por consecuencia, el Tribunal Oral Penal n*1 conformado por Raúl Juan Carlos Guerín como presidente y Carmen Figueredo y Teresita Godoy Prats como vocales, fueron sumando audiencias al juicio. 

Nueva Mirada dialogó con Carolina González, integrante del Colectivo de Mujeres Organizadas de Corrientes, sobre la audiencia de este martes. 

Carolina apoyó a Griselda López, madre de Irina, desde el momento en que el caso tomó notoriedad pública en el 2018. Por consecuencia, la acompaña en cada jornada judicial.

La referente feminista explicó que de los peritos del área de salud que estaban pactados para declarar en la sexta audiencia, sólo prestaron testimonial los bioquímicos. 

Los profesionales manifestaron que en el cuerpo de Irina no se encontraron rastros de alcohol ni de Misoprostol. 

Esta es una cuestión muy importante a tener en cuenta, ya que Sebastián Pardo, quien ejerce como defensa del único acusado, Wenderson de Sousa, realizó mucho hincapié en esas dos pruebas. 

Por un lado, aparentemente uno de los objetivos de la defensa sería demostrar que el hecho de ingerir Misoprostol ante un supuesto aborto, es lo que habría llevado a Irina a desangrarse.

Por otro lado, la aparente ingesta de alcohol la colocarían Irina con la imagen de “mala víctima” y a Griselda en calidad de “mala madre”, ante el Tribunal.

No sólo hoy fue afirmado el hecho de que la joven no consumió bebidas alcohólicas el día del hecho, sino que su madre declaró siempre que Irina era una joven con valores, estudiosa y servicial. 

Es importante resaltar que Griselda le había propuesto cuidar al bebé que su hija había tenido hace poco, con el objetivo de que continúe sus estudios. Propuesta que Irina había aceptado, por lo que ese 2018 ella retomaría los estudios secundarios. 

Una vez más nos encontramos ante una defensa revictimizante, con preguntas que demuestran la urgente necesidad de una reforma judicial feminista y la aplicación concreta de la perspectiva de género en los juicios. 

Cabe destacar que la querella la conforma Salvador Pischedda, quien representa a la madre de Irina. Por su parte, la fiscal es Sonia Meza y la Secretaría está a cargo de Tamara Brescovich.

La próxima audiencia está pactada para el martes 25 de abril desde las 9:00 hs. Aún no hay fecha fijada para el veredicto.