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Caso Gustavo Marcolli: se realizó un nuevo abrazo al STJ
El Colectivo Yo Sí Te Creo Corrientes se manifestó frente al Superior Tribunal de Justicia para pedir que la causa contra el psicólogo infantil baje a primera instancia.
Este lunes el Colectivo Yo Sí Te Creo Corrientes realizó un abrazo simbólico al Superior Tribunal de Justicia, ubicado en calle Carlos Pellegrini al 934. El objetivo de la convocatoria era interpelar nuevamente a la institución judicial para que baje a primera instancia la causa contra el psicólogo infantil, Gustavo Marcolli.
En el expediente 144366/17 fue sobreseído el denunciado y la familia querellante apeló en todas las instancias posibles para pedir justicia por el niño Rayo, menor sobreviviente.
Tanto la Asesoría de Menores N°2 como la Fiscalía General pidieron la imputación de Marcolli, ya que consideran que el menor tiene un relato coherente en todas las pericias y a la par, existiría arbitrariedad en la absolución.
Por consecuencia, la Fiscalía General pidió la nulidad del primer fallo y la necesidad de que la causa baje a primera instancia, para que el psicólogo infantil atraviese los justos procesos.
Cabe recordar que la denuncia fue radicada en 2017 y desde entonces, la familia querellante y el niño Rayo esperan justicia.
En la causa habría pruebas como dibujos indicadores de haber sobrevivido a un ataque sexual y la pericia de Cámara Gesell sería contundente en relatos y detalles.
Por ende, el desconcierto ante la absolución del denunciado, su no imputación, la lentitud judicial y la revictimización a la madre del menor, como quien lo induciría al Síndrome de Alienación Parental, es total.
Tanto la familia querellante como el Colectivo Yo Sí Te Creo Corrientes sostienen que la causa estaría contaminada de cuestiones políticas, y eso fomentaría la impunidad de Marcolli.
El próximo paso es esperar el veredicto del Superior Tribunal de Justicia, sobre si la causa debe volver o no a primera instancia y por consecuencia, se realizó fuera del edificio judicial un abrazo simbólico.
Se espera que los ministros estén formados en la perspectiva correspondiente y respeten y crean en el relato del niño Rayo, quien para la fecha de los hechos denunciados tenía apenas 5 años.