OPINIóN

Corrientes otra vez bajo agua: algo que se pudo evitar

En la madrugada del domingo la ciudad de Corrientes recibió intensas lluvias y quedó bajo agua. Dejando en evidencia lo limitadas que son las planificaciones en la Capital ante estos sucesos.

Fotografía: Nicolas Jacobo

(Por Jeremias Giordano)

La Inundación en Corrientes volvió a dejar en evidencia, una vez más que el plan hídrico del cual se jacta el municipio no funciona. Pero además dejo en claro que no se tiene en cuenta el trabajo científico basado sobre la crisis ambiental y que tampoco hay una planificación territorial de la ciudad.  

En las aperturas de sesiones ordinarias de los poderes legislativos, tanto del gobierno provincial como el municipal, Eduardo Tassano (intendente) y Gustavo Valdés (gobernador), se jactaban del plan hídrico para la ciudad y de las obras hídricas para la provincia. Dos días después llueven 190mm en Corrientes y la ciudad amanece completamente inundada dejando una catástrofe casi sin precedentes.

Cabe aclarar, como trascendió, que el plan hídrico que Eduardo Tassano anuncio es un plan preparado para lluvias de menos de 50mm de intensidad, con lo cual no serviría para la tormenta que hubo de 190mm (en principio). Es decir que tal plan hídrico para inundaciones es inexistente y fue un despropósito anunciarlo como tal. 

El plan hídrico también tenia el objetivo de mejorar los desagües pluviales para que el agua se escurra rápido. Pero quedo en evidencia, según los vecinos de la ciudad, que el sistema de recolección de basura del municipio esta en crisis y la acumulación que hay en los barrios termina afectando los canales de agua. 

Otras de las cuestiones que es muy evidente, es que la ciudad de Corrientes no tiene una planificación territorial y habitacional que permita tener, en principio, un buen plan de evacuación y prevenir situaciones de peligro en la viviendas como las que se registraron de derrumbe de casas, y calles prácticamente convertidas en ríos.  

Cabe aclarar que la capital Correntina es una de las capitales del país con mas asentamientos o barrios populares, 60 en total, sin ningún tipo de planificación habitacional y con una crisis de ésta. Incluso llegando a situaciones de no dejar avanzar urbanizaciones en barrios registrados en el RENABAP, Registro Nacional de Barrios Populares, por seguir profundizando esos terrenos en manos de propiedades privadas. Y a nivel provincial teniendo al INVICO, Instituto de Viviendas de Corrientes, sin un plan de viviendas sociales hace mas de 10 años e intentando cerrar los pocos que quedan.

Además a esto se le suma que los fenómenos climáticos que la provincia atraviesa son producto del calentamiento global, el cual esta directamente relacionado con la profundización de un modelo productivo, el monocultivo, y sobre el cual hay advertencia científica para tratarlo y para evitar este tipo de desastre incluso a través de la obra publica.

 Quedo en evidencia que Corrientes no tiene un plan para sus periodos de sequía y inundación, propios de la crisis climática. Entonces el territorio se pasa de incendio a inundaciones como si pasaran por primera vez y se le pide la solución a los milagros.

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