Nueva Mirada Radio dialogó con Juan Arnedo, ex trabajador del Instituto de Viviendas de Corrientes (Invico) y dirigente gremial, quien expresó la preocupación por la desactivación del Programa de Viviendas de Esfuerzo Propio y Ayuda Mutua (Epam).

Los trabajadores de Invico ya realizaron una asamblea dónde habían alertado sobre la desaparición del plan y el peligro que eso significaba para empleados del Instituto y para familias con posibilidades de acceso a viviendas. Arnedo también explicó sobre la preocupación de que "hace muchos años el Instituto de Viviendas de la provincia no tiene una planificación habitacional concreta".

"Es bastante preocupante y grave la paralización, con el objetivo final de cerrar, las construcciones de Esfuerzo Propio y Ayuda Mutua, el plan habitacional que se conoce como Epam", comentó Arnedo. Cabe recordar que el Epam es un programa que tiene como objetivo las construcción de viviendas a través de los vecinos, cooperativas y pequeños contratistas generando mucha mano de obra. 

También fue claro con el debate actual sobre la tierra y el terreno habitable en Corrientes: "la idea de la nueva gerente, por lo que ya se informó, es que todo se va a hacer por empresas como se está haciendo con otros programas y muchos lugares de trabajo quedan parados, los que son específicos del programa. Por otro lado el costo de las viviendas también se encarece muchísimo porque no se hace cargo el Estado sino que el precio lo pone la empresa y también la mano de obra".

Según Arnedo con la paralización no solo se está hablando de dejar paralizados algunos puesto de trabajo sino que también hablan de despidos, y son más de 150 trabajadores. 

La falta de planificación habitacional en la provincia para reforzar el negocio inmobiliario 

En el caso del Epam, según Arnedo, son dos los conflictos. "Uno hacia adentro con la perdida del trabajo y otro hacia afuera, el cual significa que muchas familias pierdan la posibilidad de tener acceso a una vivienda teniendo en cuenta los costos que pondrá una empresa. Los trabajadores del Epam, por lo general, son de las mismas familias con posibilidades de acceder a la vivienda, y son familias que no tienen los recursos para ingresar, por ejemplo, a los sorteos que se hacen del ProCrear", aseguró Arnedo.

Los problemas del Invico no son de ahora. Ya hace 8 años que se encuentra paralizado en cuanto a las construcciones de viviendas y "en el 2018 encararon, desde el gobierno provincial, la idea de armar un fondo fiduciario y hacer las construcciones de casas a través del banco, es meter el derecho de acceso a las viviendas en una timba financiera. Esa idea sigue dando vuelta, a veces la ponen en voz alta y otras veces no", detalló.

Según estudios realizados por el propio Instituto acerca de estos programas habitacionales bancarios que el gobierno provincial quiere implementar, solo un 5% de los 80 mil inscriptos podría acceder de acuerdo a sus recursos. "La idea de ellos es transformar al Instituto en un organismo que otorgue créditos hipotecarios", expresó el dirigente gremial.

Corrientes viene arrastrando un déficit habitacional de más o menos unos 3 millones de familias sin viviendas. "Cuando se realizaron acá en Corrientes los registros correspondientes al Registro Nacional de Barrios Populares para hacer entrega de lotes con servicios, se bajó el crédito nacional en el 2018 a través del Fondo de Integración Socio Urbana (FISU) y hasta el día de hoy no se entregó ningún lote", dijo Arnedo. 

"En los lugares donde hubo inscripciones, e capital, intentaron desalojar a familias porque querían entregar esos terrenos al Fideicomiso Santa Catalina, terrenos que eran del Ejército Argentino, del Estado y terminaron en manos privadas", finalizó Juan Arnedo y dejó sobre la mesa la discusión actual que atraviesa el derecho de acceso a la vivienda en la provincia de Corrientes.