Cuatro cazas F-16 de la Fuerza Aérea de Israel perpetraron un ataque con misiles a un barrio de la capital de Siria, Damasco, que dejó, al menos cinco víctimas mortales y 15 heridos las primeras horas del domingo.

La ofensiva se produjo a menos de dos semanas de que Siria sufriera un demoledor terremoto que provocó la muerte de 5.840 muertos, según los últimos datos oficiales.

Sin embargo, las víctimas continúan en aumento a medida que transcurren los días desde que sucedió el desastre natural y se suceden las tareas de rescate.

Según fuentes oficiales, el ataque generó destrucciones al Instituto Técnico de Artes Aplicadas y al Centro Cultural en la zona de Kafersuseh, en Damasco". El Ministerio de Defensa sirio comunicó que el ataque fue realizado con "ráfagas de misiles" contra algunos puntos de la capital y sus alrededores, "incluidos barrios residenciales habitados por civiles".

De acuerdo con el comunicado ministerial, la agresión provocó la destrucción de varias viviendas de civiles y daños materiales en diferentes barrios de Damasco y sus alrededores. Además, medios de comunicación sirios mostraron graves daños en un edificio que resultó afectado durante la ofensiva.

Aunque en los últimos años Israel lanzó cientos de ataques aéreos contra Siria, el ritmo de sus agresiones se ha acelerado recientemente.