PANORAMA POLíTICO

El Té está pasando de tibio a helado

Valdés, empecinado en la candidatura de su hermano, se está quedando cada vez más aislado. A los socios que ya se fueron con Colombi, se le están sumando los que amenazan con un tercer frente que podría incluir hasta La Libertad Avanza.

Siempre se dice que los mandatarios que están concluyendo su mandato y no tienen reelección, sufren el síndrome del té tibio para graficar la soledad cuando el poder se escurre de las manos. En el caso del gobernador correntino, Gustavo Valdés, parece que el té está pasando de tibio a helado.

Ya sufrió una fuga importante de socios y dirigentes del Radicalismo, con Ricardo Colombi, que hace meses viene caminando la provincia como candidato a gobernador. 

Esa fuga pareció detenerse, en parte, con el ungimiento de Valdés como presidente del Comité Provincial de la Unión Cívica Radical (UCR). Pero, en estas últimas semanas, se produjo un nuevo quiebre de lo que fue la alianza ECO-Vamos Corrientes, con el surgimiento del llamado “Grupo Alondra”.

El anfitrión de la primera reunión fue el presidente de la Cámara de Diputados, Pedro Cassani, quien también es titular de ELI, el segundo partido que más votos reunía en la alianza gobernante detrás de la UCR.

De la partida también estuvo el senador nacional, Carlos Mauricio Espínola. Quien, alejado del Justicialismo, ubicó a su alfil, Facundo Palma, como presidente de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY). Lugar siempre codiciado por Valdés, durante la Presidencia de Mauricio Macri, como en la actual de Javier Milei.

Del “Grupo Alondra”, también participaron el referente del Partido Autonomista, José Antonio Romero Brisco; y una de las principales dirigentes del Partido Liberal, Any Pereyra. Ambos diputados provinciales, y dirigentes de dos partidos políticos que hasta el 2023 pertenecían a ECO-Vamos Corrientes.

Pero la sorpresa mayor llegó con la segunda reunión de este agrupamiento de dirigentes, que se realizó este lunes en el Hotel Turismo. Hasta allí se acercó el diputado nacional y presidente de La Libertad Avanza, Lisandro Almirón. Días después que Valdés filtró en la prensa una reunión con Karina Milei y “Lule” Menem, con una foto de archivo en la que se lo veía con la hermana del presidente. 

Hasta el momento, el gobernador solo rescató las promesas de lealtad de su vicegobernador, Pedro Braillard Poccard, que regentea el Partido Popular; y del funcionario municipal y titular de la Coalición Cívica, Hugo “Cuqui” Calvano.

Dentro del barco de Vamos Corrientes todavía se mantienen los históricos armadores y monjes negros del Radicalismo, Carlos Vignolo, Sergio Flinta y Noel Breard.

El encaprichamiento de Valdés para imponer a su hermano, Juan Pablo, como su sucesor en la Gobernación, es el motivo del alejamiento de muchos dirigentes de peso y de la reticencia de la Casa Rosada para suscribir una alianza melliza a la celebrada en Chaco entre la UCR y LLA.

A punto de entrar en la cuenta regresiva para realizar la convocatoria a las elecciones provinciales, el gobernador deberá decidir entre seguir con su capricho o abrir la jugada para que el té, al menos, se vuelva a entibiar.

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