La vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, volvió a afirmar que existe un “Estado paralelo” y una “mafia” que está tomando las decisiones en el país. Lo hizo en un acto donde se inauguró un polideportivo en la localidad bonaerense de Avellaneda.

Inicialmente, dijo que en su último discurso luego que se conociera la condena en su contra, no realizó ni un renunciamiento ni se autoexcluyó, sino que "hay proscripción". 

La vicepresidenta llamó a marchar el próximo 24 de marzo "bajo una consigna: Argentina y democracia sin mafias".

En ese sentido alertó que, a 40 años de la recuperación de la recuperación de la democracia, “vemos que convive con un Estado paralelo, y está capturada por las mafias”. “no es justo para los que sufrieron las consecuencias de la dictadura ni para los millones de argentinos que siguen apostando a que la democracia es la mejor manera de vivir entre nosotros”, afirmó. 

Cristina se refirió al último fallo, por el cual la Corte Suprema ordenó un fuerte aumento en la coparticipación de la ciudad de Buenos Aires. "Estamos ante un hecho ajurídico, como si hubiera desaparecido el Estado de derecho", señaló.

La vicepresidenta recordó que el ex mandatario, Mauricio Macri, "modificó con un decreto simple" en 2016 "lo que le tocaba al Gobierno nacional de coparticipación y le dio muchísimo al Gobierno de la ciudad de Buenos Aires”, 

“Esto fue resuelto con otro decreto del actual Gobierno nacional, y con una ley sancionada por el Congreso”, relató. Sin embargo, la Corte Suprema "hizo caso omiso a esa ley", y volvió a modificar el reparto de recursos con un fallo.

Para Cristina, "el partido judicial influye en la calidad de vida de los ciudadanos”. Justificó su afirmación puntualizó “cuando te arrancan la cabeza con la factura del celular, internet, cable, es porque hubo un juez que dictó un Amparo para que no sean servicio público, lo mismo pasó con las prepagas". 

Finalmente, la vicepresidenta pidió a la sociedad que "se despabile".